El nogal es un árbol de hoja caduca que puede llegar a medir más de 25 metros de altura. Es originario de Persia y fueron los romanos los que lo extendieron por europa. Comienza a dar frutos a los diez años y no tolera bien las heladas, que si coinciden con la floración pueden echar a perder la cosecha. Es además un árbol solitario, ya que produce productos quÃmicos que son tóxicos para muchas plantas y sus raÃces crecen considerablemente, por lo que el nogal no debe ser plantado cerca de edificios o estructuras que puedan ser dañadas por las raÃces de este árbol. Por este mismo motivo, si vas a cultivar varios nogales, hay que dejar una separación mÃnima de 18 metros. Además, al igual que el resto de sus parientes de la familia de las juglandáceas, el nogal tiene una estrategia para que otros árboles y plantas no le disputen el espacio, la luz ni el agua. Para ello, despliega un arma en forma de sustancia quÃmica (la juglona) cuya función es inhibir el crecimiento de otras plantas en su entorno inmediato.
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